Placas solares fotovoltaicas: ¿Qué son, qué tipos de paneles existen y cómo funcionan?

Sep 5, 2025 | CENTRO DE APRENDIZAJE

En los últimos años, las placas fotovoltaicas han dejado de ser una tecnología del futuro para convertirse en una solución presente, eficiente y rentable para hogares, negocios y comunidades. Pero ¿sabes realmente qué son, cómo funcionan y qué tipos existen? En este artículo te lo explicamos todo de forma clara y sencilla.

¿Qué son las placas solares fotovoltaicas?

Las placas fotovoltaicas, también conocidas como paneles solares, son dispositivos que convierten directamente la luz del sol en electricidad. Están formadas por células fotovoltaicas —generalmente de silicio— que generan corriente eléctrica cuando son expuestas a la radiación solar.

Este tipo de tecnología forma parte del grupo de energías renovables y destaca por ser limpia, silenciosa y respetuosa con el medio ambiente. Además, permite generar electricidad en el mismo lugar donde se consume, lo que reduce pérdidas en transporte y mejora la eficiencia energética.

¿Cómo funcionan las placas solares?

El funcionamiento de las placas solares se basa en el llamado efecto fotovoltaico. Este fenómeno físico ocurre cuando los fotones de la luz solar impactan sobre las células de silicio, liberando electrones y generando un flujo de corriente continua.

Esta electricidad se dirige hacia un inversor, que transforma la corriente continua en corriente alterna, apta para el consumo eléctrico habitual en viviendas o negocios. A partir de ahí, la energía puede utilizarse directamente, almacenarse en baterías o incluso inyectarse a la red eléctrica.

Tipos de paneles solares fotovoltaicos

Actualmente existen varios tipos de placas solares, y elegir el adecuado depende de factores como el espacio disponible, el presupuesto o el tipo de instalación. Los más comunes son:

1. Paneles monocristalinos

Están fabricados con una sola estructura cristalina de silicio. Se reconocen por su color negro uniforme y son los más eficientes del mercado, alcanzando rendimientos del 18% al 22%. Son ideales para espacios reducidos o instalaciones que requieren el máximo aprovechamiento energético por metro cuadrado. Precio aproximado: entre los 80 € y 300 €.

2. Paneles policristalinos

También conocidos como multicristalinos, están formados por varios cristales de silicio. Su color suele ser azul, y su eficiencia ronda el 15% al 18%. Aunque son algo menos eficientes que los monocristalinos, tienen una buena relación calidad-precio y son muy utilizados en instalaciones residenciales y comerciales. Precio aproximado: entre los 40 € y 270 €.

3. Paneles de capa fina (thin-film)

Fabricados con materiales como el teluro de cadmio o el silicio amorfo, estos paneles son flexibles, ligeros y más económicos, aunque su eficiencia es inferior (entre el 10% y el 12%). Son útiles para aplicaciones especiales, tejados irregulares o instalaciones portátiles. Precio aproximado: entre los 100 € y 250 €

4. Paneles Bifacilales

Los paneles bifaciales son una opción cada vez más popular por su capacidad de captar radiación solar por ambos lados. Mientras que la cara principal recoge la luz solar directa, la cara posterior aprovecha la luz reflejada por el suelo u otras superficies. Esto permite un mayor aprovechamiento energético y una eficiencia más alta, especialmente en instalaciones con superficies reflectantes como cubiertas blancas o suelo con grava clara.
Aunque requieren una instalación específica para maximizar la captación trasera (como estructuras elevadas o superficies reflectantes), su rendimiento superior los hace muy atractivos para proyectos industriales, comerciales o incluso autoconsumo avanzado. Precio aproximado: entre los 80 € y 300€

¿Qué ventajas tienen las placas solares?

Invertir en energía solar fotovoltaica ofrece múltiples beneficios:

  • Ahorro económico: reduce drásticamente la factura de la luz desde el primer día.
  • Autoconsumo: te permite generar y consumir tu propia energía.
  • Sostenibilidad: contribuye a reducir la huella de carbono y a cuidar el planeta.
  • Revalorización del inmueble: una vivienda con placas solares aumenta su valor en el mercado.
  • Mantenimiento mínimo: los paneles solares requieren muy poco mantenimiento y tienen una vida útil superior a los 25 años.